Fueron muchas las razones que nos llevaron a tomar este camino, niños y niñas con una vida de la mano del cáncer, adolescentes enojados porque una enfermedad les truncó su vida, jóvenes llenos de esperanza y alegría, madres y padres desolados por una cruel enfermedad pero firmes y valientes; todos ellos con grandes enseñanzas y lecciones de vida que transformaron la nuestra.

Así comienza esta historia, un grupo de amigos solidarios con el dolor y las adversidades que conlleva el cáncer, se unió para alzar la voz por ellos en la necesidad de vivir una niñez con juegos, diversión y el cobijo en diversas carencias. Honrar su lucha se convirtió en nuestra bandera.
 

Fundar nuestra labor en la psicología humanista de Carl Rogers, nos ha dado la oportunidad de facilitar las condiciones emocionales, psicológicas y espirituales de cada caso con el objetivo de buscar el bienestar integral de los pacientes desde el diagnóstico inicial.

Es así como el 18 de marzo del 2010 se constituye legalmente

Ayúdame a Sonreír ante el Cáncer, A.C. (ASAC).